¿Con la tapa fija?

La directiva “Tethered Caps” es parte de la directiva de plástico no retornable que fue aprobada por la Unión Europea en 2018. Sus principales objetivos son promover una economía circular baja en CO₂-y reducir los desechos plásticos. Con este fin, para 2030 todos los envases de plástico en el mercado de la UE deberían ser reciclables, y el consumo de plásticos no retornable debería reducirse significativamente. Esto da lugar a diversas prohibiciones y directrices que tienen por objeto frenar el uso de productos plásticos no retornables o promover su reciclaje.

Especialmente para la industria de bebidas, y en particular para todos los embotelladores de refrescos carbonatados, agua sin gas y bebidas asépticas, las siguientes tres pautas son relevantes:  

• A partir de julio de 2024, todos los cierres de botellas PET no retornables de hasta tres litros, como las llamadas “Tethered Caps” deben estar colocadas en la rosca de forma fija.
• A partir de 2025, el 77% de todas las botellas de bebidas se recogerán sin mezclas en sistemas de devolución y el 90% hasta 2029.
• A partir de 2025, todas las botellas PET no retornables deben tener una proporción de reciclaje de por lo menos un 25%. A partir de 2030, esta proporción se elevará a un 30%.

Para que estas directrices entren en vigor en cada uno de los Estados Miembros, deben convertirse en leyes nacionales o ser adaptadas. Este proceso, que por un lado da libertad a los Estados Miembros individuales, garantiza por otro que el acuerdo transnacional sobre normas importantes se extienda a menudo durante varios meses. En este caso, por ejemplo, esto crea ciertas incertidumbres de planificación para los fabricantes de bebidas que tienen que implementar estas normas de manera económica.

Cuanto más tiempo tarde en que la directiva se convierta en ley nacional, menos tiempo tendrán las empresas para una implementación rentable y sostenible. E incluso si los períodos de transición nacionales pueden retrasar levemente la introducción de las Tethered Caps, estos no se detendrán. Por lo tanto, es aún más importante que todas las partes involucradas, desde las tapas, las preformas y el fabricante de herramientas, integren la nueva normativa en su propia cadena de valor con el mayor valor añadido posible. En este contexto, ahorrar recursos y reducir los equivalentes de CO₂ son particularmente relevantes. Es por eso que los fabricantes de bebidas se están enfocando principalmente en reducir el peso de los cierres y las roscas. Su posterior desarrollo y el acuerdo sobre nuevas normas son la consecuencia lógica de la directiva. La directiva se acompaña de pruebas iniciales de consumo en mercados relevantes, que brindan información importante sobre la aceptación de los nuevos cierres. Después de todo, el nuevo cierre no debería estropear la experiencia de beber: Para que los consumidores se acostumbren rápidamente al nuevo principio, su manejo debe ser compatible con los hábitos intuitivos previos del consumidor al abrir una botella de bebida. El mensaje de sostenibilidad de que los cierres ya no terminarán en el medio ambiente o en el mar ciertamente puede ayudar. Después de todo, los consumidores están prestando cada vez más atención a la compatibilidad ambiental de los envases de bebidas y, según los estudios, incluso cambiarían de supermercado si este ofreciera envases más ecológicos. Aquellos que se posicionan claramente pueden ganarse la confianza de los minoristas y de los consumidores y, por lo tanto, fortalecer su posición en el mercado.

Incluso si no todas las condiciones marco pueden ser definitivas en este momento, los fabricantes de bebidas afectados ya deben pensar activamente en posibles soluciones que les permitan adaptar a tiempo su producción a las nuevas leyes. En este sentido, los expertos de Bottles & Shapes™ de KHS, están siempre a disposición.

A partir del diálogo directo con sus clientes, KHS sabe que, aunque todos sienten cierta presión de tiempo, en algunos casos todavía no están seguros de qué decisiones deben tomarse y en qué momento, para poder implementar la directriz a tiempo y evitar costes innecesarios. Básicamente hay dos opciones:

La mayoría de los fabricantes de cierres ofrecen variantes de tapas fijas adecuadas para adaptarse a los cierres que se utilizan actualmente. Con ellas, los fabricantes de bebidas cumplen con los requisitos legales mínimos. En este caso no se espera un ahorro de peso, pero el trabajo de renovación sigue siendo manejable.

Una geometría modificada reduce el peso tanto del cierre como de la rosca; aquí se superan los requisitos legales. Los fabricantes de cierres ofrecen una gran cantidad de variantes para tipos más ligeros que se pueden probar con antelación durante el funcionamiento con un esfuerzo manejable. El peso ahorrado reduce los costes de material y genera ahorros de costes y recursos a largo plazo.

En consonancia con los demás aspectos de la directiva sobre plásticos no retornables y la respectiva filosofía corporativa y de sostenibilidad de los fabricantes de bebidas, KHS ofrece la opción de adoptar una visión integral de las botellas PET no retornables que se utilizan actualmente, para permitir un mayor ahorro de peso y el uso mayor o total de material reciclado. Los ingenieros de procesos de KHS asesoran a los embotelladores interesados en la selección de preformas hechas de PET reciclado, y se aseguran de que en la máquina de moldeo por soplado las botellas mantengan su forma perfectamente simétrica y estable. El enfoque integral de los expertos de KHS también incluye garantizar que las preformas entren suavemente en la máquina de moldeo por estirado-soplado y que en la máquina taponadora las tapas se puedan atornillar a la botella sin problemas. En vista de la creciente relevancia de la reciclabilidad de los envases y la demanda de un “Diseño para la Sostenibilidad”, la atención se centra también en otros componentes como cierres, etiquetas y pegamentos.

En el campo del envasado secundario, KHS también ofrece otras opciones para embalar el envase de forma que se conserven los recursos y se reduzcan las emisiones, por ejemplo, en papel, en un film 100% reciclado o, en el caso del Nature MultiPack™, completamente sin envoltura, sino mediante uniones de los envases con puntos adhesivos, fácilmente removibles. El ‘Carton Nature Pack’ es nuevo, en el que el pack se mantiene unido mediante un clip hecho de cartón. En el sector seco de la línea, los expertos de KHS aseguran que una botella cuya geometría ha sido modificada, todavía encaja en la formación de su pack y no genera problemas en la máquina enfardadora. Cualquiera que, con el apoyo del proveedor de sistemas con sede en Dortmund, dirija su atención a la botella completa y su embalaje exterior, reconocerá un gran potencial de ahorro de recursos y costes, lo que también contribuye a la sostenibilidad en todo el proceso de producción, y puede ser comunicado de manera creíble al consumidor cada vez más crítico.

Junto con el embotellador se desarrollan soluciones económicas y técnicamente maduras a partir de una sola fuente, que se pueden implementar en la práctica sin ningún problema, y cuyo alcance y costes se basan en las necesidades y posibilidades del cliente. Esto no se trata de “un u otro escenario”. Por ejemplo, si ahora se desea conservar el tipo de cierre por razones de tiempo y dinero, más tarde se puede cambiar de manera flexible a un cierre más ligero, siempre que las condiciones marco ya estén establecidas.

Con este enfoque de consultoría integral, en esta desafiante situación KHS muestra posibilidades con visión de futuro. La empresa ofrece a sus clientes una base confiable para la toma de decisiones y soluciones flexibles, especialmente para aquellos que, en vista de la incertidumbre actual, aún no saben exactamente hacia dónde dirigirse en el futuro. Ningún aspecto se pasa por alto ni se omite, desde el TCO hasta el cronograma.