Con una huella pequeña
En una región donde la protección del medioambiente ya es una cuestión de supervivencia, Coca-Cola Peninsula Beverages (CCPB) se compromete de forma consecuente a reducir su huella ambiental. El embotellador sudafricano está respaldado por tecnologías de ahorro de recursos “Made in Germany”, de KHS.
Si bien todavía hay personas que dudan del cambio climático, gran parte de África en particular ha estado sufriendo durante mucho tiempo bajo sus efectos muy reales: Desde 2015, la disminución constante de las precipitaciones y el aumento de las temperaturas han causado sequías devastadoras y hambrunas extremas, especialmente en el sur del subcontinente. Malawi, Zambia, Namibia, Zimbabwe y Botswana se encuentran entre los afectados.
Crisis del agua
Sudáfrica también está muy afectada por la falta de las habituales lluvias de verano – un país que está más asociado con las zonas de cultivo de frutas y de vides de la región del Cabo o con los bosques subtropicales de la costa este. El público mundial reaccionó con gran sorpresa a la crisis del agua en Ciudad del Cabo, que desde principios de 2018 está llevando a la metrópolis de millones de personas al borde del desastre: la suspensión del suministro público de agua. “Estábamos cerca del Día Cero”, recuerda Greg Morse, Director de Fabricación y Cadena de Suministro de CCPB, el embotellador de refrescos líder en la región. A partir de este momento, sólo se habría dispuesto de 20 litros de agua por persona y día, para lo que habría que hacer cola con envases de plástico. La emergencia sólo se pudo evitar a último momento con medidas rigurosas: El consumo de agua está limitado a 50 litros por cabeza; a modo de comparación: Los ciudadanos estadounidenses consumen alrededor de 300 litros por día. Los inodoros solo se enjuagan con agua de lluvia cuando es absolutamente necesario y si es posible. Las manos se lavan con menos frecuencia y, en cambio, se desinfectan más seguido. El precio del agua se duplicó en solo tres meses. La agricultura también hizo su contribución y redujo su consumo en un 50%. La consecuencia: 37.000 personas perdieron sus trabajos, los precios de los alimentos aumentaron drásticamente.
La sostenibilidad en el foco
En esta dramática situación, los embotelladores de bebidas como CCPB, como grandes consumidores de agua, están particularmente bajo el escrutinio del público: “Por supuesto, se espera que prediquemos con el ejemplo”, explica Morse. “Debemos rendir cuentas de esto a nuestros clientes y al público, no solo en tiempos de crisis, sino todos los días”.
Por tanto, el fabricante de bebidas considera con razón la percepción de la responsabilidad social corporativa como un factor clave de éxito. “La sostenibilidad está absolutamente en foco”, acentúa Morse. “Trabajamos incansablemente para minimizar nuestra huella de carbono en todos los niveles. Empezamos a hacer esto a principios de la década de 2000 cuando fusionamos las cuatro plantas de nuestra región en una mega planta de producción en Parow Industria, un suburbio de Ciudad del Cabo”. Hoy estamos involucrados en el programa ‘Un mundo sin residuos’, de Coca-Cola. Hasta 2030, la compañía tiene como objetivo recolectar y reciclar tantas botellas y latas usadas como se vendan en todo el mundo. Aquí, por ejemplo, CCPB participa en organizaciones que quieren aumentar el reciclaje de botellas PET y vidrio en Sudáfrica. Eso tiene sentido si se considera que el embotellador fabrica sus propias preformas y busca desesperadamente rPET para lograr su objetivo de utilizar un promedio de un 25% de material reciclado. Para las botellas PET de la marca de agua Bonaqua se utiliza incluso un 100% de reciclado.
Con los retornables todos se benefician
La estrategia de sostenibilidad de CCPB también incluye utilizar más botellas retornables de vidrio y de plástico que algunos de sus competidores: Su participación en este segmento es actualmente de alrededor del 20%, y para 2025 se espera llegar al 40%. No solo hacen una contribución significativa a la prevención de residuos y, por lo tanto, a la sostenibilidad ecológica, sino que también tienen beneficio económico. Si se devuelve una botella PET retornable, el producto se ofrece a un precio un 30% más bajo, lo que beneficia tanto a los consumidores sensibles al precio como a la empresa, que llega a un grupo más amplio de compradores.
Las botellas PET retornables se fabrican en la máquina KHS de moldeo por estirado-soplado InnoPET Blomax V, que entró en funcionamiento en 2019, una de las primeras del mercado. Sobre todo, se destaca por su ahorro de recursos y, en el proceso de producción, tiene una huella de CO₂ significativamente reducida. Esta máquina de última generación de tecnología de moldeo por estirado- soplado de KHS garantiza un consumo de energía hasta un 10% menor gracias a un horno de calentamiento de infrarrojo cercano (NIR) optimizado. El sistema de recuperación de aire AirBackPlus, que también se utiliza en el proceso de soplado de botellas retornables, permite ahorros de aire a alta presión de hasta un 40%. La nueva tecnología también ahorra recursos en el consumo de material: Debido a una mejor distribución del material durante el proceso de estirado-soplado, se utiliza PET hasta ahora no estirado debajo del anillo de apoyo, de modo que se pueden emplear preformas más livianas.
En khs.com encontrará más informaciones sobre nuestra máquina lavadora de botellas Innoclean DM con carga y descarga en extremos opuestos.
Limpieza con ahorro de recursos
Las máquinas lavadoras KHS logran ventajas con sus innovaciones técnicas; también disponibles como equipamiento posterior para máquinas existentes.
01 – Regulación del agua fresca en función del rendimiento
Adaptación de la entrada de agua fresca al rendimiento actual de la máquina a través de una válvula reguladora
VENTAJA
- Consumo de agua fresca significativamente menor con rendimiento reducido de la máquina
02 – Eco-Carrier
Cestas de botellas un 25% más livianas con aberturas laterales para un mejor enjuague
VENTAJA
- Menor arrastre de sosa cáustica y calor dentro de la máquina
- Menor absorción de calor, mejor balance energético.
- Ahorro de medios de limpieza
- Menor esfuerzo mecánico del sistema de accionamiento
03 – LESS (Liquid Efficiency Spraying System)
Función de ahorro de energía para bombas de rociado al reducir la presión de rociado a aproximadamente 0,3 bares durante las paradas.
VENTAJA
- 80% menor consumo de energía en el modo standby
- Opcional: La presión de rociado flexible permite el procesamiento de botellas de vidrio ligeras o botellas PET
04 – Eco-Chain
Cadenas portacestas de peso optimizado
VENTAJA
- Durabilidad un 25% mayor
- Menor transferencia de calor
Puede encontrar más información sobre el ahorro de recursos con las máquinas KHS en el artículo “Cada gota cuenta”.
Confianza en la tecnología
“Con KHS nos une una buena relación de más de cuarenta años”, dice Morse, al describir el vínculo con el constructor de máquinas de Dortmund, y se puede sentir que existe una confianza profunda y creciente en la competencia tecnológica. “Incluso en la época de la empresa predecesora SEN, adquirimos llenadoras de ellos. Y si en el mercado aún existieran los formatos de la botella de vidrio de 1 litro, todavía las máquinas seguirían funcionando, estoy convencido de eso”.
“No nos limitamos solo a entregar máquinas”, explica Stephan Mürset, gerente regional de ventas de KHS. “Tenemos un diálogo intenso al mismo nivel, y comprendemos las necesidades específicas de Greg y sus colegas, por ejemplo, cuando CCPB también desea producir botellas para otros embotelladores. Tenemos una visión técnica muy similar”. Morse confirma que la química es la misma: No nos guiamos solo por los precios, las transacciones las hacemos con personas. Por supuesto, la tecnología tiene que ser la correcta: el equipo que vimos en acción en el sitio de KHS realmente nos convenció con su funcionalidad simple y su solidez excepcional”, agrega. La buena relación no solo se debe a la tecnología sofisticada, sino también a la sólida presencia en Sudáfrica del proveedor de servicios del equipo: “Tenemos un equipo muy eficaz aquí en el Cabo”, enfatiza Mürset. “La instalación y la puesta en marcha fueron realizadas por nuestros técnicos locales”. Los especialistas altamente competentes, algunos de los cuales han sido capacitados en Dortmund y otros en el propio centro de capacitación de KHS en Johannesburgo, por supuesto también están disponibles durante las operaciones en curso, por ejemplo, para auditorías, mantenimiento o reparaciones.
Un gran problema relacionado con la sostenibilidad en Sudáfrica es, por supuesto, el uso responsable de los recursos, especialmente del agua. En este sentido, la tecnología con ahorro de agua ayuda en el proceso de producción: Con dos nuevas máquinas lavadoras, que el proveedor de sistemas de Dortmund instaló y puso en marcha en Parow el año pasado, este aspecto se solucionó con éxito. Una de las máquinas procesa botellas PET retornables con un rendimiento de hasta 26.400 botellas de 1,5 litros o hasta 19.200 botellas de 2 litros por hora. La otra lava hasta 36.000 botellas de vidrio retornables por hora, con un volumen de 300 a 500 mililitros. Gracias a una serie de innovaciones (ver recuadro), ambas utilizan alrededor de una cuarta parte menos de agua que sus predecesoras. Así, contribuyen de manera importante al ahorro, en el que CCPB ha logrado resultados notables gracias a esta inversión y a otras medidas: En los últimos 12 años, el consumo de agua por litro de bebida terminada se ha reducido de 3,6 litros a 1,7 litros en la actualidad.
Gestión ejemplar del agua
Parte del agua se obtiene a través de nuestros propios pozos. Aquí también la sostenibilidad es prioritaria, en relación con una reposición constante: Cada pozo es revisado previamente por instituciones geológicas para verificar su idoneidad, las tasas de producción permitidas solo se utilizan hasta el 50% y se bombea a ciertos intervalos para que el agua subterránea pueda regenerarse. Antes de utilizar el agua para fabricar los productos, para garantizar la máxima calidad se nanofiltra en seis etapas de purificación.
Greg Morse está particularmente orgulloso del manejo consciente de CCPB del escaso recurso agua: “Aquí no tenemos absolutamente ninguna razón para escondernos. Al contrario: A fines del año pasado, debido a nuestra gestión ejemplar del agua, la Ciudad del Cabo nos otorgó, como una de tres empresas, una calificación de cinco estrellas”. El compromiso también incluye la participación en diversas iniciativas regionales que, entre otras cosas, aseguran que más personas tengan acceso a agua potable.
»El equipo de KHS realmente nos convenció con su funcionalidad y solidez«.
Director de Fabricación y Cadena de Suministro, CCPB
Sin final feliz a la vista
Cuando en junio de 2018, poco antes de la siempre retrasada hora cero, finalmente comenzó a llover de manera prolongada y persistente en la región del Cabo, los niveles en los depósitos de agua estaban aumentando lentamente. Esto está lejos de ser un final feliz: La gente de Ciudad del Cabo es ahora muy consciente de que, frente al cambio climático, también se pueden esperar sequías en el futuro. Por lo tanto, continuará aprovechando todas las oportunidades para utilizar consciente y moderadamente el valioso recurso agua. Con la ayuda de aplicaciones en sus teléfonos inteligentes, están informados sobre el nivel en los depósitos a diario. Desde un máximo de hasta 1.200 millones de litros por día antes de las sequías de 2015 a 2018, el consumo de agua en la metrópoli se ha estabilizado ahora entre 600 y 800 millones de litros. Toda la industria también está invirtiendo en tecnologías para aumentar la eficiencia del agua. CCPB quiere seguir estando entre los pioneros: “Nunca deberíamos volver a vernos en esta situación”, dice Greg Morse con convicción. “Los ciudadanos están mucho mejor informados y son conscientes de sus responsabilidades. Ciudad del Cabo superó muy bien este desafío: otras ciudades con condiciones comparables pueden beneficiarse de nuestra experiencia”.